Toda caída y golpe en la cabeza o columna es potencialmente peligroso y debe ser evaluada por un especialista.

 

Las lesiones del Sistema Nervioso Central requieren la atención inmediata y el estudio integral de los pacientes con traumatismo craneoencefálico, trauma craneofacial, trauma de columna vertebral. 

 

Atención integral e inmediata incluye un diagnóstico precoz, tratamiento inmediato y rehabilitación adecuada.

 

La atención que ofrecemos a nuestros pacientes se basa en el más avanzado conocimiento de nuestros especialistas, la mejor tecnología disponible y lo más importante, el cuidado personalizado y ético de cada paciente.

 

El traumatismo craneoencefálico (TCE) es un "daño al cerebro, de naturaleza no degenerativa, causada por una fuerza externa, que puede producir una disminución o alteración del estado de consciencia, dando como resultado un deterioro del funcionamiento de las capacidades físicas y cognitivas".

 

Estas lesiones siguen siendo la principal causa de muerte en el mundo.  La lesión cerebral traumática (LCT) contribuye a casi un tercio de todas las muertes relacionadas con lesiones relacionadas a accidentes de tránsito, caídas, accidentes deportivos, violencia y armas de fuego.

 

Lesión primaria: Es la producida por el daño mecánico infligido en el momento de la lesión.

Lesión secundaria: Está constituida por aquellas alteraciones que se producen después del episodio inicial y pueden ser debidas a hipoxia, isquemia o una presión intracraneal elevada y a sus consecuencias.

Un componente muy importante en el manejo de pacientes con neurotrauma es la prevención y la reducción de las lesiones secundarias asociadas con un aumento de la morbilidad y la mortalidad.

Por lo general, el neurotrauma constituye una emergencia que puede empeorar rápidamente, por lo que requiere un diagnóstico precoz para así implementar un tratamiento oportuno por parte de un equipo multidisciplinario encabezado por un neurocirujano, intensivista y rehabilitador, optimizando el cuidado y la evolución de los pacientes.

 

Diagnóstico: Para lograr un diagnóstico precoz, es importante contar con equipos de apoyo al diagnóstico entre los cuales el más importante es la Tomografía Axial Computarizada (TAC), radiografías y Resonancia Magnética Nuclear en casos necesarios.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Tratamiento: Con el fin de evitar el daño secundario, es muy importante el tratamiento oportuno, de donde viene la frase "Tiempo es cerebro". Complementado con un adecuado tratamiento quirúrgico y rehabilitación se brinda el mejor resultado para el paciente.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Entre los tipos de lesiones por trauma tenemos:

• Fracturas creaneales: Definidas como una solución de continuidad en el tejido óseo. Son potencialmente peligrosas ya que exponen el contenido intracraneano al exterior lo cual puede llevar a infecciones cerebrales. También fragmentos óseos pueden causar hemorragias dentro del cerebro. En la mayoría de casos su resolución será quirúrgica y en caso de haber pérdida de tejido óseo se indica el uso de mallas de titanio para reemplazarlo.

 

• Hematoma Epidural: Es un tipo de sangrado que se encuentra entre la capa epidural y el hueso del cráneo, dependiendo de su volumen, son extremadamente peligrosos por su rápida evolución, de no ser tratados puede llevar a secuela neurológica permanente o muerte. Lo más frecuente es el antecedente de caída de poco tiempo de evolución acompañado de pérdida de consciencia, náuseas, vómitos y deterioro del sensorio. Su diagnostico es a través de Tomografia Axial Computarizada (TAC) y dependiendo del volumen del sangrado (coágulo) y el estado general del paciente su resolución puede ser quirúrgica.

 

• Hematoma Subdural: Pueden clasificarse en 2 tipos:
  • Agudo: En cuyo caso los síntomas se presentan inmediatamente posteriores a la caída o impacto de alta energía. Por eso un diagnóstico rápido y una resolución quirúrgica oportuna puede cambiar de manera importante el resultado final del paciente.
  • Crónico: Tiene el antecedente de caída 2 a 3 meses previos a los síntomas, los cuales pueden ser cefalea, mareos y deterioro cognitivo, usualmente se presenta en persona en personas adultas mayores, que incluso no recuerdan haber sufrido la caída. El tratamiento quirúrgico variará según la extensión del hematoma, grado de cronicidad, comorbilidades del mismo. Un diagnóstico y tratamiento oportuno garantizaran que nuestro paciente pueda acompañarnos por muchos años más.

 

• Hemorragia Subaracnoidea Traumática y Contusión Cerebral: Se podrían clasificar como grados menores de lesión en relación a los anteriores de manejo usualmente médico, sin requerir tratamiento quirúrgico, deben ser monitorizadas y evaluadas por el especialista para junto a la familia, determinar el mejor tratamiento.